Se acercan las Navidades y uno piensa que va a tener tiempo para hacer esas cosillas que siempre se dejan para cuando se supone que hay tiempo... ¡Error. En Navidades el tiempo se dilapida entre vapores etílicos y digestiones complicadas, cuando no se evapora como por arte de magia preparando con los amigotes las resacas y las digestiones pantagruélicas!

Se acercan las Navidades y uno piensa que para el 30 de diciembre aún quedan unos cuantos días, en todo caso suficientes como para acercarse al ordenador y terminar esa aventura que comenzamos hace ya unos meses... ¡Error. Las Navidades son como las minas de Moria. Uno sabe cuándo y cómo entra en ellas, pero jamás si saldrá entero o será descuartizado por un cuñado o la suegra en la cena de Nochebuena!

Se acercan las Navidades y uno piensa en que el tipo de la imagen de entrada es tierno y bonachón y tendrá compasión con los perezosos... ¡Error. Creerse lo de las campanillas y los renos es un error. Ese tipo no es de fiar, hay que tener mucho cuidado con él porque no va a mover un dedo para ayudarte a terminar tu aventura para el primer Criterium Cliffhanger Adventures. Si acaso, no reparará en gastos para que te vayas de compras y pierdas una oportunidad única, porque el segundo Criterium Cliffhanger Adventures atenderá a los Cliffhanger 008 y siguientes!

¡Huye ahora que estás a tiempo. Ponte a escribir ya mismo, ni se te ocurra dejarlo para mañana porque mañana será tarde...!

Cuidado con este tío

Publicado el

jueves, 19 de diciembre de 2013

Etiquetas